viernes, septiembre 07, 2007

Retorno a la competición

Tras un breve periodo de vacaciones internáuticas, ya estoy de nuevo enchufado, así que retomo el pulso al blog.

Ha sido un mes de Agosto competitivamente nulo, aunque he entrenado un mínimo de cinco días semanales, y estoy deseando participar mañana en la carrera de Figueroles para comprobar mi estado de forma y ver de nuevo a todos mis compañeros de correrías.

Lamentablemente la fiesta de mañana se ve empañada por el tremendo desastre que ha supuesto el incendio de la comarca del Alcalatén; creo que se ha preparado para recordar la catástrofe, allí estaremos para lo que sea.
Sigo teniendo ligeros problemas con mimalditotalónderecho, aunque no me impiden entrenar ni hacer vida normal, ya veremos como evoluciona el inconveniente.

viernes, agosto 03, 2007

Operación Verano

Todavía me queda una semana para irme de vacaciones; estoy ansioso de que llegue el momento. El inicio del verano está siendo complicado, “gracias” a la OPERACIÓN QUITAR PAÑALES que se está alargando más de lo deseado.

En cuanto a los entrenamientos, es el verano que más y mejor estoy entrenando, haciendo entre 60 y 70km semanales con bastante calidad. El parón obligado tras la lesión en la MiM me ha servido como descanso para acometer una nueva temporada, en la que mis principales objetivos son:

- Bajar holgadamente de los 40’ en el 10.000 de Almazora
- Hacer una buena media maratón de Castellón. Va a ser la primera vez que prepare esta carrera, siempre la he hecho en plan tranqui; a ver si bajo de 1h30.
- Mi siguiente objetivo será la maratón de Valencia –sí, de nuevo a por ella-; por tercer año consecutivo acudiré, y en principio mi objetivo será bajar de 3h15.
- Esta temporada incluyo como una de las carreras objetivo la Maratón de Borriol; me gustó mucho el año pasado y en esta segunda edición quiero salir fuerte.
- Finalmente estará ahí, y con más ganas que nunca –hay que resarcirse del abandono de este año-, la MiM08, en la que me propongo –si el tiempo y las lesiones no lo impiden-, atacar la barrera de las 6h45.

Además de esto tengo previsto acudir a Figueroles, Fons de la Tardor, Algemesí o Segó, Paiporta, Vilavella, Moró, 10.000 de Burriana,…

Bueno, éstos son los planes, espero que las lesiones me respeten y este año poder acudir a algunas carreras más de las que he ido esta temporada pasada (¿vale, Ayacucho?). Es una gozada ir a las carreras y encontrarte con tanta gente conocida, cada vez me gusta más el ambiente que se respira.

jueves, julio 26, 2007

Marcha Nocturna a la Mola del Morico

I MARXA NOCTURNA A LA MOLA DEL MORICO

Organiza: Grillo Espectáculos S.L.U. ,Prospecciones Geológicas los Kilos y Fotografía Creativa Juanmarunning
Fecha: Cualquier noche es buena, preferiblemente con luna llena.
Inscripción: 70 € mediante transferencia bancaria o efectivo en la salida. Es imprescindible llevar justificante de pago para presentar en salida.
Avituallamientos: Autoavituallamientos (self-service), los que se deseen. La organización se reserva el derecho de no hacer avituallamientos.
Patrocinadores: Grillopizza, frontales Dolce Gabana., fábrica de artículos de piel “QUÉ RASCA HACE”



Finalmente pude acudir a la cita sin retraso, después de batir el record mundial de dar bocadillos a niños pequeños. Tras una llamada a la organización –Kiya- avisando de mi asistencia me lanzo raudo y veloz por la carretera hacia el check point de encuentro.

A las 20:54 llego a la gasolinera de Borriol, y allí se encuentran tanto los participantes así como la organización. De inmediato Grillo comprueba que todos hemos realizado el ingreso correspondiente; el fotógrafo oficial de la carrera, Juanmarunning, inmortaliza el acto y nos dirigimos al lugar de salida en perfecta caravana correril.

Llegamos al aparcamiento habilitado por la organización, donde Grillo nos da las instrucciones pertinentes –vosotros seguidme a mí y punto-. Preparamos nuestras equipaciones; destaca el frontal marca Dolce Gabana de Patri, último modelo presentado en la pasarela de París, así como los frontales tuneados de los Running –que, por cierto, son mayoría en la expedición-, en conjunto con el resto del equipo: van como un pincel.
Ayacucho luce un frontal de las guerras púnicas y una camiseta con “I love Almenara way of life”, e insiste en comprobar que llevo el picardías debajo de mi equipo. Berto lleva una mochila algo exagerada y, ante la voluminosidad de la misma, la organización se decide a pesarla. Resultado: 46 kilos de víveres. A pesar de las protestas de Berto se establece un peso máximo por persona de 25 kilos, por lo que Berto deja en el coche, entre otras cosas, dos jamonespatanegra y tres quesosgarciabaquerocurado, así como una garrafa de 10 litros de cocacola. Los Kiyos van de VittorioyLuchino, hechos un primor. Esto parece la pasarela Cibeles.

Los Runnings se reúnen en círculo, hablan de la táctica a seguir y realizan un baile un poco extraño… ¡son un poco raritos!

Se da el pistoletazo de salida y … ¡salimos andando todos! Creo que es en protesta por el precio abusivo de la inscripción, pero no hay pancartas y todo es buen rollo. Algunos llevan el frontal en marcha aunque todavía es de día, pero es que hay que lucir modelito. De pronto, Berto intenta saltar del grupo, pero estábamos atentos y logramos abortar la escapada.

Comenzamos a subir con ritmo tranquilo, dándole al pico sin parar y disfrutando del paisaje. En algunos tramos de senda hay algunas zarzas y se abuchea a la organización por no pasar el rulo.

Tras una deliciosa subida, llegamos a la pista y allí nos espera una sorpresa: ¡dos nuevos participantes! Son Juanmarunning –que abandona sus tareas de reportero para convertirse en avezado corredor- y Mariarunning, la benjamina del grupo, que nos dará toda una exhibición de saber correr.

Tras el parón obligado y después de que Grillo recibiese el pago de las dos inscripciones de última hora, reanudamos la marcha, internándonos en la zona más agreste del recorrido.

Las vistas son espectaculares: se divisa toda la costa –excesivamente iluminada, a mi parecer-, así como buena parte de la sierra. Grillo nos traduce lo que sus congéneres locales comentan a nuestro paso, parece que se ha creado gran expectación en la fauna local ante la carrera.

A pesar de la excelente señalización del recorrido, Grillo duda cada vez más, creo que tiene problemas con las gafas de visión nocturna. Ayacucho me achucha por detrás, pero no le dejo adelantarme, ¡faltaría más! En un momento dado bajamos el ritmo y, como íbamos andando, tenemos que parar. Parece que algunos se han perdido, así que Berto baja raudo en su busca; mientras tanto, Ayacucho y un servidor aprovechamos para tontear un poco ante la atenta mirada de Grillo, y dejamos inmortalizada nuestra relación en uno de los árboles del recorrido.

Sobre las 22:15 llegamos a la cumbre de la Mola del Morico, lugar en el que la organización ha decidido hacer parada para avituallarnos y esperar al resto de participantes que acudían desde Montornés.

Apiñados en un par de rocas nos disponemos a degustar los exquisitos manjares que nos hemos traído cada uno de su casa; Berto saca de la mochila una mesita plegable y cubiertos y se enfrasca en la deglución de primer plato, segundo plato, un par de repitos y postre. Los demás acabamos con nuestros bocadillos y lo miramos embobados y admirados de su capacidad trituradora.

Y, ¡oh, sorpresa! Por gentileza de Grillopizza, aparecen ante nuestros ojos una cantidad ingente de pizzas de todos los gustos y sabores… ¡con razón la inscripción costaba 70 €, esto es una ganga! A Berto le pilla algo lleno, pero hace un esfuerzo y se coloca estratégicamente en primera línea de fuego, bloqueando el acceso al condumio como si de un pívot de la NBA se tratara. Aplausos y vítores para la organización que, abrumada, nos regala con unas palabras de agradecimiento que obvio reproducir.

En mitad del jolgorio se oyen voces avisando de la llegada de los participantes montornesinos y, de súbito, un can hambriento aparece de entre los riscos y se lanza sobre las pizzas. Ante la irrupción por sorpresa de Cana –que no era otra la cánida que llegaba precediendo a Ritxi y CarlosPi-, nos quedamos paralizados, lo que aprovechó la susodicha para arrearse entre pecho y espalda media docena de pizzas. Tuvo que ser Berto el que pusiera fin a tal atropello –con las cosas del comer no se juega- y logró poner en fuga a la saqueadora.

Pero ésta, tras la retirada estratégica, volvió a la carga con mayores bríos si cabe, arrebatándole el bocadillo de tortilla a nuestra estrella emergente, Mariarunning; eso sí, lo hizo limpiamente, tal y como certifican los árbitros federados que vieron la jugada. Parece ser que tras la ingestión del citado bocadillo Cana calmó su voracidad, así que la calma volvió al grupo.

Tras el incidente, Ritxi nos aseguró que Cana había salido de casa cenada, cagada y meada (aunque esto último no venía a cuento) pero, ante la mirada incrédula del grupo, logramos sonsacarle que, indignado por el abusivo precio de la inscripción, decidió mantener a dieta a Cana hasta la carrera para que ésta se resarciera en los avituallamientos.

Tras las explicaciones de Ritxi continuó la degustación, amenizada con los chascarrillos del Kiyo y las ocurrencias de unos y otros. Se realizó una sesión fotográfica en la que posamos todos luciendo nuestros trapitos y, finalmente y a pesar de lo a gusto que se estaba –exceptuando que estábamos a 3º bajo cero y con vientos de 70 km/hora-, nos decidimos a reemprender la marcha en sentido inverso.

De inmediato un grupete encabezado por una recuperadísima aunque barrigona Cana se lanzó a un salvaje descenso a tumba abierta amparados en una profunda oscuridad que facilitó su escapada. Tras ellos, el grueso del pelotón encabezado por Mariarunning y Ritxi intentábamos alcanzarlos. El alto ritmo impuesto por la cabeza del pelotón provocó algunas caídas leves, una de las cuales dio con el trasero de Patri en el suelo, aunque ésta se levantó tan velozmente que ni se le manchó el modelito.

Tras un espectacular acelerón final logramos alcanzar al grupete cuando éste llegaba a la pista. Allí se volvió a disgregar el grupo: Mariarunning y Juanmarunning por un lado y Ritxi, CarlosPi y la insaciable Cana por otro se despidieron del resto del grupo, que continuaba hasta meta. Abrazos, besos y alguna lagrimita fueron el epílogo de esta emotiva separación, pero la realidad se imponía y debíamos retomar la carrera.

De nuevo Berto intentó un demarraje, pero de nuevo éste fue abortado por el grupo, que inició la bajada final con un trote alegre y dicharachero; algunas chicas del grupo (y el kiyo) nos demostraron que se puede hablar sin parar y bajar de noche por una senda llena de piedras. La temperatura era magnífica por lo que apetecía mucho correr, así que Paquirunning se puso en cabeza y mantuvo un ritmo estupendo que seguimos todos hasta llegar al aparcamiento.

Una vez finalizada la excursión, a las 23:45 aproximadamente, intercambiamos impresiones durante un ratillo y, tras acordar repetir la experiencia a la vuelta de las vacaciones estivales, nos despedimos efusivamente (más unos que otros).

En resumen, una noche inolvidable en compañía de gente estupenda y en un entorno espectacular,… ¿qué más se puede pedir? Gracias por vuestra compañía.

miércoles, julio 11, 2007

Ultimos días en la Ronda Este

El próximo viernes -¡por fin!- será el último día en el que rodaré por la Ronda Este hasta Septiembre.

A pesar de que me he preparado un plan de entrenamiento para esta época del año con el objetivo de mejorar mi velocidad, con menos quilometraje y series cortas y que, por esto mismo, me debería permitir hacerlo a mediodía, la verdad es que me cuesta hacer seis días consecutivos de entreno a estas horas y en estas condiciones.

Hoy, sin ir más lejos, me tocaban 7km de rodaje tranquilo y 9 series de 500, y me he notado, sobre todo durante el rodaje, terriblemente cansado; y eso que descansé el domingo. He estado a punto de no hacer las series, pero una vez hecha la primera he aguantado otras seis más. De todos modos, esta tarde estoy totalmente ploff, así que a ver si esta noche puedo acostarme pronto para recuperar.

Últimamente me llevo el MP3, así no se me hace tan pesado el entreno, puesto que casi todos los días estoy más solo que un oasis en el desierto.

La semana que viene comenzaré a rodar al atardecer, y además por el Clot, un lugar ideal para entrenar, con suelo de tierra y sombra a lo largo de sus tres bellos quilómetros. Lo combinaré con sesiones por la playa, y seguro que este cocktel me repondrá las fuerzas raudamente.

Luego, a mediados de Agosto, veinte días entrenando por la comarca de Molina de Aragón me vendrán de perlas para preparar la próxima temporada, que ya tengo repleta de objetivos.

miércoles, julio 04, 2007

Rodada laaaaaarga



Anoche, a eso de las tantas de la madrugá me dió por salir a hacer una rodada larga. Y trotando, trotando, trotando, va y a la que me doy cuenta estoy en ... la Luna. ¡Co...o! Con la ilusión que me había hecho siempre visitar la Luna va y, sin comerlo ni beberlo, me planto allí.


Y es que según me recuerdan muchos, parte de mi familia debe provenir de aquí -dicen de mi que soy un lunático-; así se entiende mi embargante emoción al llegar al Mar de la Serenidad, me siento en casa.

Mi primera sorpresa es el tiempo que hace: es pleno día y hace un sol del carajo -aprieta más que en la Ronda Este-. Además -o por eso-, estoy más solo que la una, igual que en la Ronda Este (ahora que lo pienso, ¿será la Ronda Este un trozo de la Luna traído por Mr. Marshall o algún don Bienvenido similar?).

Mientras voy rodando me acuerdo de Ayacucho, esto le gustaría, le recordaría seguramente el Maratón de Hoggar, aunque aquí no hace ni pizca de viento (curioso, oye); se lo tengo que comentar, a ver si quiere venir un día a rodar conmigo, y que venga Berto también; igual pongo un post en el foro y montamos una salida forera.

Llego a un lugar en el que parece que hace un tiempo han jugado un partido de baloncesto los americanosdelaenebeá: hay unas huellas de zapatos enormes y una bandera norteamericana bastante agujereada, la pobre. Los guarretes se han dejado un montón de chatarra por aquí, no se conforman con contaminar la Tierra.


Veo una cumbre y creo que es el monte Leibniz, una preciosa montaña pedregosa de unos 6.100 metros de altura, y me pongo a subir con una facilidad extraordinaria, parezco Xixanrunning; la sensación es de que peso cono unos 8 kilos, tan ligero me siento; pero al rato (no llevo reloj, me lo he vuelto a olvidar en el País de las Maravillas) decido volver, me falta aire. Ya volveré con Ggroc cuando éste vuelva victorioso del kilómetro vertical.

Me vuelvo a colocar mi flamante MP3 verdealga, recuerdo de una noche loca con Grillo en los alrededores del Bartolo con únicamente un frontal como guia y... bueno, esa es otra historia que quizás algún día venga a cuento. La cuestión es que sin apenas darme cuenta llego a mi cama de nuevo, más feliz que un ignorante.

Curiosamente por la mañana me he levantado como nuevo, debe ser el entrenamiento en altura, ... ¿o ha sido todo un sueño regalo de mi musa Selene?.




lunes, julio 02, 2007

Desvaríos


¡¡Puaghh,vaya pendejada!! Salgo a correr con el sombrero mejicano a las 14:00 para evitar el caluróndelamuerte y resulta que me dejo los pantalones cortos y me toca salir con boxers. Cruzo todo el centro de la ciudad con mi sombrero calado hasta las cejas, gafas de solo CQC y la camiseta técnica por fuera, dejando entrever los boxers azul marino -menos mal que no opté por los rosa esta mañana-.

Y como me toca rodaje tranquilo y eso yo no me lo salto por nada del mundo, ahi voy a ritmo suavesitosuavesito con la mirada fija al frente e intentando prepararme para cualquier contingencia cuando, de súbitocupino, una voz conocida grita:
"- ¡¡Hijo míooo, para un momentooo!! "

Tras un instante de duda razonable, decido hacer como si el Pisuerga pasara por Matalascañas y hago un cambio de ritmo brutal acompañado de un cambio de dirección alejándome de la fuente de sonido a la máxima velocidad permitida por las leyes de tráfico.
Tras recuperar el resuello aunque no la consciencia, vuelvo a mi ritmo cansino, llegando ya a mi zona de entrenos,... ¡co...o, si yo no quería venir aquí!
Me dispongo a dar media vuelta cuando aparece ante mí un habitual de la zona que, armado de una sonrisa socarrona, me espeta: "¡¡Hombre, qué modelito que llevas hoy!!¿Qué, un nuevo equipaje para las series, no?"
Totalmente indefenso me preparo para una ronda de verónicas, pases de pecho, chicuelinas,... que me propinará sin compasión mi compañero de viaje,... En fin, otro día más con la rutina habitual.

Todo puede ocurrir, así que revisad bien vuestra mochila antes de salir de casa... :)

martes, junio 26, 2007

Domingo por el Bartolo

El pasado domingo me levanté a las 5:45 dispuesto a hacer el recorrido Motocross-Bartolo (por las crestas) y volver.

A las 6:25 aparcaba el coche en el motocross y, nada más salir del asfalto para coger la senda -no había hecho ni 100 metros-, ¡zass, torcedura de mi tobillo derecho! Cabreo monumental, juramentos en hebreo, ... me siento a recapacitar unos segundos y decido apretarme fuerte la zapatilla y continuar, a ver qué pasa.

Los primeros minutos el tobillo me molesta bastante, pero el dolor va disminuyendo. Voy bastante tranquilo, a trote suave todo el rato, excepto la subida desde la font de la Teula y la subida final al restaurante. Mientras voy subiendo decido que llegaré hasta el principio de las crestas y volveré, no quiero arriesgarme a fastidiarme más el tobillo por las crestas.

Cuando bajo me molesta bastante el tobillo, así que bajo con el freno de mano puesto, cual monje de clausura faldeado hasta los tobillos, y así y todo sufro.

Bajando hacia la font de la Teula me tropiezo con la Kiya, acompañada por el bueno de Kiel y por Mario, y paramos a charlar un momento. Parece que está reconociendo el recorrido y, desde luego, Kiel es uno de los mejores guías.

Llego al coche y miro las pulsaciones medias: ¡123ppm! Pues si que he ido tocándome las pelotas, vaya paseo. Total, 1h40 incluyendo la parada por la torcedura y la xarraeta con Kiel y familia.

Durante el resto de la mañana me molesta algo el tobillo; por la tarde tengo partido de tenis con mi hijo, así que me armo de valor y jugamos 1h30 en la que intento correr lo mínimo posible -aunque mi hijo no muestra el menor signo de compasión hacia su renqueante progenitor-.

Por la noche, un buen baño, automasaje y hielo.

Al día siguiente me levanto bastante bien, creo que ya puedo olvidarme de la torcedura.

lunes, junio 18, 2007

Sant Joan de Moro

El viernes por la noche no podía dormir, parecía que me estrenaba en esto de las carreras. Pero es que cuando me retiré en la MiM, sabiendo que mimalditotalónderecho estaba maltrecho y que tendría que parar, me planteé como primer objetivo reaparecer en Moró.

Tras las visitas del traumatólogo y de mi magnífico fisio, Nomaz, no las tenía todas conmigo; es más, el traumatólogo no me dará el alta hasta Julio y Nomaz, aunque no me lo ha dicho directamente, no era partidario de que saliera a Moró.

Pero, en mi caso, necesito proponerme unos objetivos para motivarme, y creo que aunque ahora esté algo peor de mimalditotalónderecho que el viernes, estoy mucho mejor en general y el haber participado y acabado la carrera me ha fortalecido anímicamente una barbaridad.

El sábado a las 5h30 estaba despierto. Desayuno, me cambio, hago la visita pertinente al WC, reviso mis bártulos y me voy hacia Moró. En cuanto llego voy a exponer mi caso de la pérdida del dorsal y Petjada me comenta que ya lo habían previsto y que habían duplicado los dorsales que se recogían en las tiendas: primer tanto para la organización.

Comienza a llegar gente y, por supuesto, conocidos. Es tremenda la cantidad de gente que me conoce y/o a la que conozco, el ambiente en las carreras es entrañable, casi diría que familiar. Hablo con varios compañeros de Amics del Clot –enhorabuena a Xavi, cuarto veterano-, llegan Ritxi, Berto –hoy de calle-, Pirata, Jungla, … bueno, que sin darme cuenta es casi la hora y me pongo a calentar con Alpin y Pirata bajo una ligera lluvia que luego nos acompañaría con mayor o menor intensidad durante toda la carrera.

En la salida me despisto y no salgo adelante, síntoma de que el tiempo final no es mi objetivo. La gente, como siempre, sale disparada; yo cojo un ritmo aceptable y así pasan los primeros kilómetros por asfalto; durante unos minutos corro con Punxa, pero después lo pierdo.

En la subida me coge Pirata y rodamos juntos un buen rato; voy subiendo tranquilo, sin forzar. El haber salido retrasado hace que pille un par de tapones, pero no me preocupa, estoy disfrutando mucho; la lluvia en días calurosos como éste me encanta, la montaña huele mucho mejor cuando llueve.

Llegando arriba del todo veo a Berto, que me “anima”: “Te veo demasiado atrás, vas un poco lento”; tiene razón, pero hacía tiempo que no iba a una carrera sin objetivos de tiempo, así que había que aprovecharlo. Una vez comienza la bajada me “emociono” y comienzo a subir el ritmo; paso a varios grupetes hasta llegar a uno de tres en el que el tercero parece nervioso por pasar pero no se atreve; le animo a pedir paso, lo hace y me voy detrás de él. El suelo mojado te hace ir muy concentrado, la bajada es estrecha, de senda, …¡estoy en mi salsa! Finaliza la bajada y bajo mi ritmo, hace más de un mes que no ruedo más de una hora y hay que reservar.

El tramo que más sufro es el de la bajada por pista: si me lanzo noto que el pie derecho puede resentirse; si me freno sufren las rodillas. Así pues, lo paso como puedo y me alegra ver cuando finaliza.

Sigo a un ritmo tranquilo hasta la última bajada, en la que vuelvo a apretar. Cojo a un corredor que no me da paso, no encuentro hueco por dónde pasarle, así que en una curva veo un recto y me lanzo por allí: ¡sorpresa! He calculado mal la altura, así que utilizo mi culocolchón para deslizarme; el corredor me pregunta si me he hecho daño pero yo le respondo bajando rápido que nada, nada, mientras me frotaba con energía mis doloridas ancas.

De ahí al final pongo un ritmo sostenido y me dejo algo para el final. Voy con un chaval joven; a kilómetro y medio nos pasa un corredor bastante justito de fuerzas, está con nosotros unos metros y comienza a irse; comento con el chaval que podemos cambiar, pero que hay que dejar un cambio para el final; no lo veo muy decidido, así que aumentamos ligeramente el ritmo, lo suficiente para que no se nos vaya apenas el corredor. Divisamos meta y entonces cambio, entrando en meta con fuerzas y muy satisfecho. El tiempo no es bueno, pero no importa, hoy no.

Después viene una larga sobremesa, charlando con unos y otros, felicitando a los laureados (excepto a Jungla, que se enteró en casa de su podium). Allí estaban Ayacucho y Berto buscando desesperadamente a Grillo –enhorabuena, veterano-, Ritxi con su familia al completo, mis compañeros de Amics del Clot, y tantas y tantos foreros que participaron. Pronto llegó Erenida, una de las grandes triunfadoras del día, vaya recuperación la suya.

La organización estuvo excelente, con Petjada que parecía estar en todos los sitios, unas cocas de muerte, toda la bebida que quisiéramos,… ¡que aprendan muchas otras organizaciones!

Así pues, un día excelente de montaña en compañía de excelentes compañeros, ¿qué más se puede pedir?

viernes, junio 15, 2007

Retorno a Montaña Negra

El miércoles a mediodía me acerqué al Sanatorio para hacer mi primer entreno por montaña desde que reanudé mi vida correril normal-primero y último antes de Moró-.

Estaba algo nervioso, no sabía como me responderían las piernas tras más de un mes sin montañear, así que he salido tranquilo en busca de sensaciones. He elegido mi ruta preferida, cresteando por la senda que comienza en la parte alta del Sanatorio hasta llegar a la cantera y vuelta por el camino clásico que lleva a los naranjales que sustituyeron infaustamente hace pocos años parte del bosque existente.

Las primeras subidas y bajadas son suaves, perfectas para calentar músculos y prepararlos para la primera rampa dura -nada que ver con las aventuras de Berto, claro-. Es una subida corta pero que cuesta hacerla trotando, pero la he subido sin problemas.

Aquí vuelvo a ver, después de un tiempo, los devastadores efectos del incendio reciente que asoló la zona. El matorral ha aparecido de nuevo pero ahí siguen los espantosos e innumerables restos carbonizados, antaño acogedores huéspedes de hermosa vida animal. Oigo también el sonido de sierras talando árboles, y veo que han ensanchado la pista en algunos tramos: ¡mala cosa! No sé que me da que pronto transformaran esto en una urbanización. ¡Qué pena!

Volvamos al entreno: luego viene otro tramo suave de subeybaja y finalmente dos subidas cortas pero duras que también he hecho al trotecortito. Las sensaciones hasta ahí (unos 26 minutos) han sido buenas, ahora queda ver como acometo la bajada algo técnica que lleva hasta la cantera.

La hago con precaución, no me conviene zapatear mucho ni darle demasiada caña a mi malditotalónderecho, así que me concentro en la bajada sin arriesgar en absoluto. Me encantan las bajadas que yo llamo técnicas, bajadas por sendas estrechas con suelo irregular que exigen concentración para elegir dónde depositar los pies; aunque bajo con cuidado, consigo disfrutar de la bajada.
Una vez en la cantera, ligera subida y luego bajada por la senda que vuelve a los naranjales. Finalizando la bajada veo un corredor a lo lejos y decido cambiar el ritmo para ver si le pillo; afortunadamente iba bastante suave, así que llegando al bosquecillo del sanatorio lo paso raudo y veloz; no lo reconozco, le saludo pero creo que no me lo devuelve, hago la última bajada fuerte y acabo muy satisfecho. Quince minutos largos de estiramientos finiquitan un entreno que me ha dejado un buen sabor de boca.

viernes, junio 08, 2007

¡Echa el freno, Madaleno!...¿o no?

Pues si, ayer me pasé de frenada y por la noche me dolía algo el talón, y esta mañana al levantarme también. De todos modos, he salido cuarenta minutillos en plan tranqui -tampoco estaba para mucho más- y mañana descansaré.
Esta tarde he pasado a ver a mi superfisio y me ha dado un toque cariñoso:

- "Ya he leido lo que hiciste ayer; no te he contestado pero no debías haber rodado tanto rato"
- "Tienes razón, jefe, pero me pueden las ansias"
- "Bueno, pues frénate,... Y lo de Moró, ¿lo tienes claro?"
- "Pues,..., la verdad es que no del todo"
- "Piénsalo bien, no sea que vayamos a jorobarla"
- "Si, me lo pensaré""Hasta el lunes"

Pero a los cinco minutos de salir de allí ya me lo había pensado: "Saldré, aunque sea en plan tranqui""Bueno, puedo decirle a Jungla que me uno a su duo con Pirata y así no haré barbaridades""Mmmmm, ya veremos, todavía queda más de una semana"
¡¡Y es que me pueden las ganas, mechachis!!

jueves, junio 07, 2007

Corazón revolucionado

Hoy me he puesto el pulsómetro para salir,... ¡¡craso error!! El periodo de inactividad correril ha hecho mella en mi "probe corasón" y voy con las pulsaciones allá arriba -por el Bartolo, lo menos-.


Al menos he aguantado estoicamente 1h10 a un ritmo decente, aunque el cambio final de mi compañero Agus casi acaba conmigo.


Por otro lado, he salido sin las taloneras que estrené el lunes. La razón es que creo que me cargan mucho los isquios; hoy se me han cargado mucho menos, así que probaré unos días sin taloneras a ver si el malditotalónderecho no despierta de su letargo.


Creo que en Moró saldré en plan tranqui, no creo que en los días que me quedan recupere ni siquiera una parte significativa de mi anterior forma. De todos modos, estoy contento porque corro sin dolor y, lo que es más importante, los dolores no me aparecen en todo el día. Así pues, tomémonos la "reentré" con paciencia y esperando tiempos mejores.


Un saludo en especial para Erenida, hoy me la he cruzado en la Ronda pero iba cansado y mi cerebro no ha estado especialmente afortunado -ya sabéis las féminas que los hombres sólo tenemos una neurona, y yo la tenía sudando la gota gorda y ocupada en mantener mis músculos en movimiento- y no ha reaccionado a tiempo. La próxima vez no te escapas de que te acompañe un rato.

martes, junio 05, 2007

Vuelta a la normalidad

Ayer, tras 18 días sin correr, me calcé de nuevo mis Mizuno y rodé durante 47 minutos por mi fiel Ronda Este a mediodía.

Llevaba un par de días queriendo salir, pero el temor a la recaida y la opinión desfavorable de mi fisio frenaban mis ansias.

Al comenzar sentía algunas molestias -estrenaba unas taloneras, siguiendo los consejos de mi compañero AngelGrillo-, pero a los pocos minutos ya disfrutaba de las añoradas sensaciones. A la media hora me encontré con el infatigable Berto y rodamos un rato juntos, él contándome su experiencia en la carrera del findesemana y yo feliz de escucharle mientras corría. Luego, quince minutos largos de estiramientos, una buena ducha y como nuevo.

Me he encontrado muy bien; de hecho, en estos 18 días he salido doce veces en bici y he jugado dos días a tenis, por lo que no debo haber perdido mucho. Esta semana me dedicaré a rodar, hacer algún cambio de ritmo y ver si el malditotalónderecho me responde bien, en cuyo caso acudiré raudo y dispuesto a Moró, donde espero encontrar a un buen puñado de foreros y pasármelo en grande.

En cuanto a la lesión, ayer fui de nuevo al traumatólogo que, sin ni siquiera mirar mi malditotalónderecho, me recetó diez nuevas sesiones de fisio y me citó para dentro de un mes; entonces veríamos si las plantillas que llevo desde hace pocos días realizan su función de descarga y me da el alta. Por supuesto, no le he preguntado si podía correr, por si acaso.

martes, mayo 29, 2007

Un pequeño relato

Las dos de la madrugada de un día de Agosto. La Luna, espléndida, pintaba de plata el mar que, a su vez, me regalaba su salada y fresca brisa. Corría en busca del Clot, mi lugar preferido de entreno cuando aparco mis huesos en esta mi amada ciudad.
Tras un tórrido día de verano, la noche es serenamente bella y fresca, por lo que las sensaciones corriendo son muy placenteras. Llego al Clot y me sumerjo en él, aspirando las innumerables fragancias que emana. La Luna guía mis pasos y me siento absolutamente libre, libre y solo, solo e invulnerable, invulnerable pero insignificante, insignificante ante tamaña exhibición de poderío de La Naturaleza.
La soledad, esa amiga que siempre está cuando la necesitas, acompaña mis pasos en silencio, dejándome escuchar los sonidos de la noche del Clot, sonidos de una Naturaleza viva que me inyecta su vitalidad. Mis pies apenas rozan las piedras del camino; mientras, recuerdo los eternos versos de Machado -caminante no hay camino,…- y me inunda una sensación de paz extraordinaria.
Estoy llegando al final del Clot, o al principio; porque el Clot es una rueda sin principio ni final, dónde todos estamos de paso y nada permanece. Es nuestro espacio vital, el pequeño corazón de nuestra ciudad, tan falta de Naturaleza como sobrada de frías construcciones.
Vuelvo cansado pero enormemente feliz, sudoroso pero limpio-libre de preocupaciones, problemas, malos tragos,… La brisa de mi Padre-Mar me acaricia, preparándome para un sueño reparador; la Luna me tiende un puente de plata hacia mi casa, poderosa y protectora Hermana.
Llego e intento dormir, pero la emoción de la experiencia me lo impide, así que me siento fuera, cierro los ojos y vuelvo a los eternos versos -… se hace camino al andar…-, versos que me transportan a mundos vírgenes todavía no mancillados por nuestras manos, versos sencillos y poderosos que tranquilizan mi alma y acunan mis pensamientos que, poco a poco, se duermen profundamente en el fondo de mi mar interior.

viernes, mayo 25, 2007

Bici, bici, bici..., bici

Es lo que toca hasta que mimalditotalónderecho se recupere, bici sin cuestas; así que, a mediodía, cojo el carrilbici en la Ronda Este y pa' las playas de Benicàssim.

Las sensaciones en la bici son muy diferentes a cuando corro; noto que se me cargan los cuádriceps más durante la rodada -intento ir rapidito-, pero la recuperación es mucho más rápida; claro está que únicamente ruedo entre 1h y 1h15, por lo que debe ser como trotar media horita o algo así.

El problema llegará este findesemana, puesto que no sé por dónde hacer un rodaje largo; no me gusta ir por la carretera -demasiados coches-, no puedo ir por montaña -prohibido subir cuestas-, y el rodaje diario es demasiado corto. Tendré que informarme.
© fanning foto

jueves, mayo 24, 2007

Esta sí que sí

Bueno, lo prometido es deuda, ¿verdad, Jungla y Erenida?

Reemprendo el viaje que comencé el pasado año con la creación de este blog y prometo que intentaré actualizarlo lo más frecuentemente posible.

A día de hoy estoy en el dique seco, en lo que respecta a nuestra querida afición del correr. Una inoportuna -como todas- lesión me impide disfrutar de mis ya añoradas carreras de montaña, pero al menos me permite ir en bici -aunque sólo por llano- y nadar. Según el traumatólogo será cosa de un mes, y ya llevo casi dos semanas parado, por lo que si todo va bien dentro de poco ya rodaré por la Ronda Este, el Sanatorio, las sendas del Bartolo,...

Menos de dos semanas han pasado de LA MiM, el Tour de Francia de los corredores de la provincia, y ya parece algo lejano. Una MiM especialmente dura la de este año, con un calor que hizo mella en gran número de participantes y ofreció unas marcas bastante discretas excepto para algunos, entre ellos para el extraordinario ganador, Remigio. Pero seguro que la gran mayoría de los que no acabamos o de los que acabaron sufriendo lo indecible ya estamos pensando en la próxima edición; los que entreis en el foro montañero por excelencia, el de carreresdemuntanya, sabreis que yo soy uno de ellos.Y es que para los que por uno u otro motivo no podemos acudir a carreras fuera de la provincia (el Maratón Alpino, Oturia, Veleta, Los Castillos de Avila, Montblanc,...), la MiM es el mayor reto al que podemos aspirar, y por ello le dedicamos un esfuerzo extra, orientamos nuestra preparación a conseguir nuestra mejor forma para esta carrera y disfrutamos/padecemos al máximo ese día.

viernes, febrero 02, 2007

A ver si activo esto de nuevo

Disculpad la ausencia, pero he pasado una temporada con mucho trabajo y poco tiempo, y para poner tonterías prefiero no escribir nada.

Espero reanudar la serie de relatos sobre "El sendero de la Luna Llena" la próxima semana, e ir añadiendo todo lo que se me ocurra.