miércoles, mayo 27, 2009

El placer de la lectura

Hace tiempo que no escribo, ni aquí ni en ningún otro lugar. En estos meses he pensado mucho acerca de este vacío que se apoderaba de mí, y de sus causas, y hoy he dado con la respuesta: necesitaba leer.
Ayer decidí sacar tiempo para retomar mis lecturas, y elegí el libro "Paraíso inhabilitado" de Ana María Matute, como punto de reencuentro con las letras. Y no me equivoqué.
Es un libro que te encadena poco a poco y, que tras un inicio vacilante, me ha atrapado irremisiblemente.
La historia de una niña especial, nacida en una familia rota, escrita primorosamente en primera persona, es preciosa. Os regalo algunos fragmentos -todavía me queda media novela, pero no puedo esperar-:
“Despertar en la noche, adormecer en la mañana, y aquel vivir a contrapelo, fue quizá la razón de la tenue felicidad que me salvó de cosas como saber que nunca fui deseada, de haber nacido a destiempo en una familia que había ya perdido la ilusión y la práctica del amor.”
“ -Fíjate en los árboles, los troncos de los árboles del invierno –dijo de pronto Eduarda. …
-Son como las personas, -añadió-. Mucho follaje, mucho esplendor… tapando o protegiendo la verdadera naturaleza. Ahora llega el invierno, y el invierno no perdona: saca a la luz tanto los troncos rectos como los retorcidos. Así es el invierno. Ya te digo, como las personas en el último tramo de la vida.”
(en uno de los escasos encuentros con su padre)
“Y entonces sentí un gran deseo de comunicar la paz o la felicidad, esa peligrosa palabra que no debe pronunciarse y que de pronto había llegado a mí. Pero sólo se me ocurría apretarle la mano. Lo hice una sola vez, y casi al instante él me devolvió el apretón: y lo hizo dos veces. Los dos mirábamos hacia el cielo casi blanco, y con otro apretón de manos volví a decirle que le quería. Me respondió de la misma forma. Creo que nunca, ni antes ni después, he mantenido con nadie una conversación más íntima, más explícita. Ni tan bella.”
Sigo leyendo, continuo renaciendo, vuelvo a vivir otras vidas,..., ¡que bello es leer!

lunes, febrero 23, 2009

Carrera de Fondeguilla y previos

Tenía ganas de que llegara esta carrera, tanto y tan bien me habían hablado de su recorrido. La lástima fue que el domingo anterior tuviera una fuerte caída en la montaña, que me dejó lleno de rasguños, algún que otro moratón y con el tobillo derecho maltrecho.
El martes seguí las sabias y experimentadas doctrinas de la pareja Nomaz-Ayacucho: hayqueandarnormal - laslesionessecurancorriendo, y me chupé 10 series de 1.000 a 3'50, 10" más lento que la semana anterior debido a las molestias del tobillo y al dolor general en todo el cuerpo.
Miércoles de rodaje suave y gimnasio y llega el jueves. Me toca hacer cambios de ritmo, pero no me encuentro bien. A pesar de todo, caliento 15' y me pongo a hacer el primero: ¡fatal! Hago 10' a 4'20 y con unas sensaciones malísimas, así que me voy trotando a casa y a descansar.
El viernes descanso, y el sábado una hora y media de tenis, ya encontrándome bien.

El domingo me levanto sin muchas ganas, pero mientras conduzco me voy mentalizando para darlo todo.
A pesar de las bajas temperaturas, decido salir con tirantes y guantes -un acierto-, y la primera parte de carrera me encuentro bastante bien. Realmente me encuentro bien hasta que llegan las bajadas, en las que voy notando molestias en el tobillo. La bajada final fue insufrible -la peor bajada que he hecho nunca-, con unas ganas locas de llegar a meta. Finalmente llego en 2h06'ypico, tocado del tobillo y del coco.
La guinda final llegó tras salir pitando hacia casa.
Cruzando la Vall me da un amago de calambre en el abductor -cosas de no estirar, las prisas-, así que paro, salgo del coche y, todavía no sé cómo, se cierra la puerta y el seguro, con lo que me encuentro en pantalón corto con el coche cerrado y en marcha, la monda.
Al poco tiempo pasa una pareja que se ofrece a llamar a la policía local. Me envían un coche patrulla -tras 20' de espera-, y un agente intenta abrir la puerta, pero lo único que logra es cerrarla más todavía, así que le digo que llame a mi casa para que me traigan las llaves.
Tictac, tictac, tictac,... pasan prácticamente todos los participantes de la carrera ante mis ojos, ..., tictac, tictac, tictac, ... Peperun para para interesarse y tiene la amabilidad de no partirse de risa delante de mí, ...., tictac, tictac, tictac,... Grillo llega, se para, aguanta estoicamente sin soltar risa alguna y -gracias mil- espera hasta que llega mi mujer, que se pegó un susto de muerte cuando le llama la policía diciendo si conocía a un tal Vicente que llevaba un Chrysler.
Total, 1h50 de película de un tío en pantalón corto en una calle de la Vall al lado de un coche en marcha cerrado, apoyándose de vez en cuando en el capó para mantenerse más o menos calentito,... ¿quién me compra el guión?

Como véis, tengo una vida muy divertida :)

lunes, febrero 16, 2009

Leed, leed

La lectura fue uno de los tesoros que mi abuelo paterno, con la inestimable ayuda de mis padres, me entregó, y que me acompañará allá donde vaya. Y es un tesoro muy especial: creador de mundos mágicos, compañero en la soledad, maestro en la vida,...

Hoy recuerdo a dos grandes de la literatura (otra de mis pasiones, algo dejada de la mano de Dios en estos últimos tiempos): Edgar Allan Poe y Julio Cortázar.

En mi adolescencia fui un voraz lector de Edgar Allan Poe, extraordinario escritor, tanto de relatos cortos como de excelentes poemas. Otro maestro de la literatura, Sir Arthur Conan Doyle, dijo de él: "Si cada autor de una historia en algo deudora de Poe pagase una décima parte de los honorarios que recibe por ella para un monumento al maestro, se podría hacer una pirámide tan alta como la de Keops."

Reproduzco un fragmento de uno de sus relatos cortos:

La caída de la casa Usher (fragmento)

" En el más verde de nuestros valles, habitado por los ángeles buenos, antaño un bello y majestuoso palacio -un radiante palacio-alzaba su frente. En los dominios del rey Pensamiento, allí se elevaba. Jamás un serafín desplegó el ala sobre un edificio la mitad de bello. Banderas amarillas, gloriosas doradas sobre su remate flotaban y ondeaban (esto, todo esto, sucedía hace mucho, muchísimo tiempo); y a cada suave brisa que retozaba en aquellos gratos días, a lo largo de los muros pálidos y empenachados se elevaba un aroma alado. Los que vagaban por ese alegre valle, a través de dos ventanas iluminadas, veían espíritus moviéndose musicalmente a los sones de un laúd bien templado, en torno a un trono donde, sentado (porfirogénito) con un fausto digno de su gloria, aparecía el señor del reino. Y refulgente de perlas y rubíes era la puerta del bello palacio por la que salía a oleadas, a oleadas, a oleadas y centelleaba sin cesar, una turba de Ecos cuya grata misión era sólo cantar, con voces de magnífica belleza, el talento y el saber de su rey. Pero seres malvados, con ropajes de luto, asaltaron la elevada posición del monarca;(ah, lloremos, pues nunca el alba despuntará sobre él, el desolado) Y en torno a su mansión, la gloria que rojeaba y florecía es sólo una historia oscuramente recordada de las viejas edades sepultadas. Y ahora los viajeros, en ese valle, a través de las ventanas rojizas, ven amplias formas moviéndose fantásticamente en una desacorde melodía; mientras, cual un rápido y horrible río, a través de la pálida puerta una horrenda turba se precipita eternamente, riendo, mas sin sonreír nunca más. "

A Cortázar lo descubrí más tarde, y también me encandiló. Curiosamente, Cortázar fue un entusiasta lector de Poe, lo que denota su excelente gusto :).

De Cortázar, cómo no, un fragmento de “Rayuela”:

"Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua."

lunes, febrero 02, 2009

Un año más, ..., Vilavella

Otro año más, puntual en la carrera de Vilavella, y creo que van cuatro o cinco seguidos, ya no lo recuerdo.

Este año tenía bastantes ilusiones depositadas en la carrera –quería bajar de 1h40-, aunque las dos últimas semanas tuve que bajar un poco el ritmo de entreno porque las rodillas me lo pedían a gritos.

Al finalizar la carrera me sentí bastante decepcionado, pero no quise pensar en ello en ese momento y decidí posponer el análisis hasta el día siguiente. Tras repasar mi carrera, llego a las siguientes conclusiones:

- Tengo poca montaña en mis piernas, por lo que en las subidas no cojo un buen ritmo.

- Llego demasiado fresco a meta, lo que quiere decir que no me exprimo en la carrera –sobre todo en las subidas largas, de pista, me acomodo demasiado-.

- Tengo que ser un poco menos “bueno” cuando alcanzo a corredores que bajan mal, y pedirles paso. Yo siempre cedo el paso al que va mejor.

Cometí varias equivocaciones:

- Elegí salir sin cinturón, lo cual fue un error, puesto que tuve que pararme en todos los avituallamientos. Para más inri, los controles estaban antes de las zonas de senda, por lo que me pasaba gente a la que luego no podía pasar en la senda.

- Como he comentado antes, debo aprovechar mejor las zonas de bajada, donde puedo ganar un tiempo importante frente a otros corredores que bajan peor.

Finalmente, llegué en 1h46 y pico, igualando mi mejor tiempo de hace dos años, pero lejos de mis cálculos.

En cuanto a la carrera, gran ambiente, excelente organización y día espléndido para correr. Mucho conocido, charlas por doquier y grata compañía en todo momento, tanto antes como durante y tras la carrera.

Ahora a entrenar duro, cambiar mis rodajes en asfalto por montaña y decidir cuándo vuelvo a competir, que ya no será en la segunda carrera de la liga, seguro.

jueves, enero 22, 2009

Primera Marcha Forera Morten-Ggroc (y 3)

(ver más abajo partes anteriores)

Nada más salir del pueblo, y tras un breve tramo de carretera a ritmo suave, un giro a la izquierda comienza a disgregar el grupo. El tramo de senda finaliza al llegar a la pista, donde me uno a un grupo con mayoría –cómo no- de gente del running.

Se impone un ritmo alegre pero charlatán, propio de un entrene suave,

-¡meeeeec, craso error, ya se verá!-.

Al poco tiempo, adelantamos a un par de corredores solitarios:

- Qué tranquila está la montaña a estas horas, ¿eh? (lo que se les viene encima)

Llegamos al final del primer tramo de pista y nos metemos en la senda que conduce al segundo tramo, pasando por la fuente, donde paramos.

- Bueno, vamos a beber un poco y esperamos a más gente.

- Vale

( a los treinta segundos)

- Bueno, ¿seguimos?

- Au, cacau

El ritmo se va acelerando, y cuando llegamos al segundo tramo de pista, se desencadena la tormenta:

- Ufff, parece que vamos fuerte.

- Yo mejor no miro el pulsómetro.

Mientras unos siguen charlando, yo decido “enfadarme” y no hablar más, excepto algún “arff, arff” para hacer creer a la peña que iba justito.

Al final de la pista, ¡AVITUALLAMIENTO! Increíble, allí está el manager con el todoterreno y cajas de agua y aquariusalcampo. Trago de agua y poco más, que parece que la gente va con el culo apretado y tiene que llegar pronto para evacuar.

Cuando llegamos a la senda que lleva al pico, otro susto: Cesarrunning va y dice que quiere apretar en la bajada, ¡GLUP!. Sin embargo, y como todos los días no tengo la suerte de ir con la élite, me digo que de perdidos al río y decido seguirlo hasta que una caída nos separe.

Llegamos al pico en fila de a uno, bastante calladitos. Los primeros tramos de la bajada, resbaladizos, los hacemos con prudencia, pero una vez llegamos al tramo soleado, se desata la guerra. Durante unos minutos un infiltrado mío consigue frenar un poco a Cesarrunning, pero en cuanto lo pasamos nos tiramos a todo meter. La verdad sea dicha, me lo paso en grande bajando así, supongo que esa es una de las razones por las que tengo que ir periódicamente a visitar a mi psiquiatra.

Tras la bajada técnica llega lo peor para mi: una bajada por asfalto que me fastidia bastante las rodillas, ya de por sí bastante castigadas tras muchos años intentando meter una canasta para abajo sin éxito. Allí hacemos un grupito capitaneado por Cesarrunning y Sergiorunner, que siguen frescos como sendas rosas. El ritmo se ralentiza un poco, por fortuna, así que podemos charlar, sobre todo Agut y yo, y luego se incorpora Mahesh.

Los últimos kilómetros, como siempre, algo feos y durillos, con tanta subiditasorpresa.

Llegamos de nuevo a las escuelas, donde está superJuanmarunning –a este tío tengo que dedicarle una entrada aparte, prometido-, y unos cuantos a los que hemos dejado llegar antes. Entre ellos, Davitillo, que corre que se las pela el chaval, y que se juntó con el Grallero, para ver si le desvelaba los secretos del elixir de la eterna juventud.

Me tuve que ir rápidamente, ya que a las 12h tenía que estar como un pincel en Benicarló. Es una lástima que casi siempre me tenga que perder lo mejor, almuerzo y charraeta con un montón de buena gente con la que comparto afición y amor por la montaña.

miércoles, enero 21, 2009

Primera marcha forera Morten-GGroc (parte 2)

(ver primera parte más abajo)

¡¡Atención, montañeros y montañeras, grandes y pequeños, rápidos y lentos!!

- Antes de comenzar la función, vamos a inmortalizar el momento -, dice el hombredelaspiernasdeoro, co-director del evento.

Y hete aquí que, como por ensalmo, aparecen dos afamados fotoreporteros cámara en ristre, dispuestos a disparar a todo el que no se mueva –incluso al que lo haga-. Y así, toda la troupe queda retratada en tal singular día.

Tras este mágico instante, hombredelaspiernasdeoro y elfabulosohombremontaña anuncian que toda la comitiva anunciará la llegada del circo montañero cruzando el pueblo en festiva comitiva.

Y así el pueblo despierta, con las primeras luces del alba, admirado ante tamaño espectáculo lleno de color y armonía: bellas domadoras de salvajes sendas montaraces, hercúleos escaladores de inalcanzables cumbres, el enigmático hombre del bañador a rayas, los insaciables miembros del running nocturno, los ponunacervezaentuentreno, y un sinfín de exóticos personajes dispuestos a pasar una mañana inolvidable.

Saliendo del pueblo, elfulgurantehombredelamoto, personaje típico del pueblo, atraviesa la comitiva ante el admirado murmullo de la troupe, lo que provoca su arrobamiento y que a punto está de costarle un accidente.

Hago aquí un paréntesis en el relato, puesto que, a partir de ese momento, entro a formar parte de la función, con lo que me pierdo gran parte de la misma, así que abro una nueva narración en primera persona.

martes, enero 20, 2009

Primera marcha forera Morten-Ggroc

Fecha: Domingo, dieciocho de enero de dos mil nueve, ocho de la mañana.

Lugar: Escuelas de Vilavella – Castellón.

Acontecimiento: Primera –y espero que no última- gran marcha forera del circo mundial montañeroforero Alpinrunning

_____________

Llego a las siete y media y aparco en la plazuela de abajo, ya que tenía que irme pronto. Mientras subo caminando hacia las escuelas, comienzo a flipar:

¡Chan, chan, charan chan, chan, chan, charan chan! (música a todo meter by el DJ SomebodyCar)

¡Pasen, pasen y vean el gran circo mundial montañero!¡Disfruten de la más variopinta fauna existente en el cibermundoforeromontañero!¡Sean partícipes de una aventura única que está a punto de comenzar!¡Y todo gratis, sí, gratis!

¡Corredores y andarines, enamorados de la montaña, proyectos de forero o superforeros, jóvenes y no tan jóvenes, amantes del bullicio o corredores solitarios, todos estáis invitados!

Solo hay una condición: BUEN ROLLO.

Ya hay una docena larga de coches y un grupo de gente charlando y, cómo no, Ggroc allí, como un clavo. Comienza la sesión de charlanga variada.

Parece que la gente responde ¡Vamos, todavía quedan infinidad de plazas libres! Es maravillosa la diversidad de la gente que acude, todos diferentes y todos unidos por una afición común, una madre-foro y por los directores de este circo que está a punto de comenzar su función, Ggroc y Morten o Morten y CROC, tanto monta, monta tanto.

¡Hombre, cuánto tiempo sin verte!

¿Tú eres mengano? pues estás mejor en foto.

¡Vaya modelito!, de las rebajas, ¿no?

¡Joer, vaya mogollón de gente, espectacular!

Escolta, xiquet, on aneu tanta gentola i tan de matí?

Muah, muah, … Muah, muah, …, Muah, muah –mucha afluencia femenina-.

Y, de pronto, … ¡entrega de dorsales p e r s o n a l i z a d o s cortesía de la sociedad GGrocSorro Ltd.!

¡SuperTakitooooooo! ¡Alpinruniiiiiiiiiiing! ¡Erenidaaaaaaaaa! ¡Perdiuetaaaaaaaa, Perdiuetaaaaaaaaa, Perdiuetaaaaaaaaaaaaa! … (así hasta casi noventa, ahí queda eso).

- Forero con malla larga, guantes, braga, camiseta de manga larga, cortavientos y gorro polar: Xe, quin fret fa (Ché, que frío hace)

- Forerocurtido, con tirantes y manga corta: Que va, home, si fa un día de collons de mico (sin traducción).


(continuará)

jueves, enero 15, 2009

Viento en popa

Tras cuatro días de entreno normal, me siento optimista.

Ya comenté la sesión de series cortas del lunes, y la semana esta yendo bien, francamente bien. El martes me acerqué trotando a las pistas, realicé mi sesión de fortalecimiento de piernas en el gimnasio y luego rodé una docenita de kilómetros a cinco más o menos.

El miércoles me tocó mi más temida sesión semanal: el fartlek. Veinte minutos de trote, dieciocho minutos a 4'07 (demasiado rápido), diez minutos de trote, ocho minutos a 4'06, cinco minutos de trote, cuatro minutos a 4'06 y trote cochinero hasta casa. Por la tarde, en el trabajo, estaba realmente cansado; la acumulación de cuatro días seguidos de entrene, un par de días duros en el trabajo y los niños que todavía no han aceptado bien la vuelta al cole, me tienen bastante machacado. Así pues, por la noche dedico cuarenta minutos a estirar concienzudamente todos los músculos que se me ocurren, algo que me relaja y ayuda a mi cuerpo a recuperarse.

Esta mañana no podía levantarme, pero como no hay más remedio, ... La mañana ha sido estresante, con el teléfono sin parar de sonar y, para ponérmelo más difícil, mi compañero Robert me tienta con irnos a comer y echarnos un par de cervecitas al cuerpo. Sin embargo, y tras una dura lucha interior, decido declinar la invitación y me largo rápidamente -no sea que cambie de opinión- a las pistas, donde me tocaban ocho series de mil.

Tras quince minutos de trote y unos estiramientos, uno de los habituales compañeros de las pistas y yo mismo hemos comenzado las series, que han ido cayendo a mis pies: 3'46, 3'41, 3'41, 3'41, 3'41, 3'42, 3'42 y 3'44 ... ¡maravilloso!

Mi compi ha abandonado en la quinta serie -tenía que irse y además iba ya justito-, y eso me ha venido un poco mal, ya que me motivo más si tengo alguien al lado, pero estoy muy contento de las sensaciones que he tenido, de la rápida bajada de pulsaciones entre series y de como estoy ahora, no demasiado cansado.

Por cierto, he coincidido en las pistas con el crack Cesarrunning, que se ha puesto ha correr como un loco haciendo series cortas -casi lo multa un AMU que estaba por allí :)-

Bien, mañana me queda una sesión de gimnasio seguida de una hora y cuarto de rodada y el domingo a la macroquedada de Vilavella. Espero veros por allí.

lunes, enero 12, 2009

De nuevo series

Llevaba más de un mes sin hacer series, debido a unas molestias en el cuádriceps izquierdo, que me aparecen cuando subo el ritmo bastante y que no se van.

Ayer, después de dos horas por la montaña muy satisfactorias, decidí que hoy probaría de nuevo. Por la noche me hice un automasaje en el cuádriceps, sin encontrar ningún punto doloroso, estiré y convení en que estaba listo para el día siguiente.

Esta mañana me he preparado bien: crema para calentamiento y mallas largas para mantener el calor en las piernas. A mediodía me he acercado a las pistas y he trotado durante 18 minutos, haciendo algunos cambios cortos al final y ejercicios de talones atrás y rodillas arriba, para posteriormente estirar sóleos, gemelos, isquios y cuádriceps y trotar 5 minutos más.

Las series que he decidido hacer son de 400m: ya puestos, vamos a arriesgar, yendo a tope y a ver si se rompe algo o no. La primera sale en 1'20", demasiado rápida para empezar, y la molestia ahí está, mucho más suave que en otras ocasiones -supongo que debido a un buen calentamiento-, pero no va a más. Y es que, para mi, es algo extraño que no duele, es una sensación de que algo ahí no funciona bien, que algo se monta sobre otro algo que no duele pero que no tiene que ser bueno,... ufff, menuda explicación.

He ido haciendo series, una tras otra, hasta llegar a las ocho primeras, saliendo entre 1'22 y 1'24, con la misma sensación. Tocaban 4' de descanso y otras ocho, pero al final el tiempo apremia y me he quedado en seis más, a 1'24-1'25.

Estoy satisfecho porque parece que puedo ir a tope y no se rompe nada, pero algo mosca porque algo se ha instalado en mi pierna izquierda y no parece querer irse.
Seguiremos con los entrenos como si nada, a ver si la molestia se aburre y se busca otro inquilino.

jueves, enero 08, 2009

Fiestas de hiel y rosas

Tras dos semanas largas de vacaciones escolares, comidas pantagruélicas y horarios cambiantes, volvemos a la rutina habitual de casa-trabajo-entreno-trabajo-casa entre semana.

Estas fiestas para mi son entrañables, puesto que nos reunimos la familia al completo: veinte personas que representan tres generaciones y que, afortunadamente, todavía no presenta ausencias que lamentar.

Desgraciadamente, esto se ve empañado por el desaforado consumismo que, desde hace unos años, ha invadido estas fechas, y contra el que es complicado luchar. Papa Noel y los Reyes Magos se dan de tortazos para repartirse el negocio, y los niños reciben una avalancha de regalos, la mayoría de los cuales dejan abandonados tras destrozar su envoltorio.

Este consumismo es muy dañino, sobre todo para los más pequeños. Los niños pierden la noción del valor de las cosas; no supone esfuerzo alguno conseguirlas, y eso les hace más débiles.

Yo soy férreo partidario de inculcar a los niños que cualquier logro se consigue a base de esfuerzo y constancia, que uno se siente enormemente satisfecho cuando alcanza un objetivo tras un duro trabajo, y que los regalos “gratuitos” debilitan al que los recibe.

Intento que piensen por si mismos, aunque su opinión, sus gustos o sus criterios no coincidan con la de la mayoría, pero cada vez es más complicado.

Por ahora tengo suerte, puesto que mi hijo mayor –tiene 10 años- creo que entiende lo que le digo, y me gusta que me discuta las cosas, muestra del correcto desarrollo de su personalidad; que se alegre cuando la profesora lo felicita por sus resultados escolares, consciente de que son fruto de su esfuerzo y constancia diaria; que quiera ir a entrenar a pesar de haber tenido un día duro, reflejo de su interés e implicación por todo lo que hace; y me gusta que, tras mi regañina por no haber hecho algo correctamente, o tras la suya por haber sido yo excesivamente riguroso o haberme equivocado, acabemos fundidos en un abrazo conciliador que me devuelve la vida.

De lo que no estoy tan seguro es de si tendré suficientes energías para lidiar con los dos pequeños, de cuatro años, pero eso ya es otra historia, pendiente de escribir.