jueves, julio 26, 2007

Marcha Nocturna a la Mola del Morico

I MARXA NOCTURNA A LA MOLA DEL MORICO

Organiza: Grillo Espectáculos S.L.U. ,Prospecciones Geológicas los Kilos y Fotografía Creativa Juanmarunning
Fecha: Cualquier noche es buena, preferiblemente con luna llena.
Inscripción: 70 € mediante transferencia bancaria o efectivo en la salida. Es imprescindible llevar justificante de pago para presentar en salida.
Avituallamientos: Autoavituallamientos (self-service), los que se deseen. La organización se reserva el derecho de no hacer avituallamientos.
Patrocinadores: Grillopizza, frontales Dolce Gabana., fábrica de artículos de piel “QUÉ RASCA HACE”



Finalmente pude acudir a la cita sin retraso, después de batir el record mundial de dar bocadillos a niños pequeños. Tras una llamada a la organización –Kiya- avisando de mi asistencia me lanzo raudo y veloz por la carretera hacia el check point de encuentro.

A las 20:54 llego a la gasolinera de Borriol, y allí se encuentran tanto los participantes así como la organización. De inmediato Grillo comprueba que todos hemos realizado el ingreso correspondiente; el fotógrafo oficial de la carrera, Juanmarunning, inmortaliza el acto y nos dirigimos al lugar de salida en perfecta caravana correril.

Llegamos al aparcamiento habilitado por la organización, donde Grillo nos da las instrucciones pertinentes –vosotros seguidme a mí y punto-. Preparamos nuestras equipaciones; destaca el frontal marca Dolce Gabana de Patri, último modelo presentado en la pasarela de París, así como los frontales tuneados de los Running –que, por cierto, son mayoría en la expedición-, en conjunto con el resto del equipo: van como un pincel.
Ayacucho luce un frontal de las guerras púnicas y una camiseta con “I love Almenara way of life”, e insiste en comprobar que llevo el picardías debajo de mi equipo. Berto lleva una mochila algo exagerada y, ante la voluminosidad de la misma, la organización se decide a pesarla. Resultado: 46 kilos de víveres. A pesar de las protestas de Berto se establece un peso máximo por persona de 25 kilos, por lo que Berto deja en el coche, entre otras cosas, dos jamonespatanegra y tres quesosgarciabaquerocurado, así como una garrafa de 10 litros de cocacola. Los Kiyos van de VittorioyLuchino, hechos un primor. Esto parece la pasarela Cibeles.

Los Runnings se reúnen en círculo, hablan de la táctica a seguir y realizan un baile un poco extraño… ¡son un poco raritos!

Se da el pistoletazo de salida y … ¡salimos andando todos! Creo que es en protesta por el precio abusivo de la inscripción, pero no hay pancartas y todo es buen rollo. Algunos llevan el frontal en marcha aunque todavía es de día, pero es que hay que lucir modelito. De pronto, Berto intenta saltar del grupo, pero estábamos atentos y logramos abortar la escapada.

Comenzamos a subir con ritmo tranquilo, dándole al pico sin parar y disfrutando del paisaje. En algunos tramos de senda hay algunas zarzas y se abuchea a la organización por no pasar el rulo.

Tras una deliciosa subida, llegamos a la pista y allí nos espera una sorpresa: ¡dos nuevos participantes! Son Juanmarunning –que abandona sus tareas de reportero para convertirse en avezado corredor- y Mariarunning, la benjamina del grupo, que nos dará toda una exhibición de saber correr.

Tras el parón obligado y después de que Grillo recibiese el pago de las dos inscripciones de última hora, reanudamos la marcha, internándonos en la zona más agreste del recorrido.

Las vistas son espectaculares: se divisa toda la costa –excesivamente iluminada, a mi parecer-, así como buena parte de la sierra. Grillo nos traduce lo que sus congéneres locales comentan a nuestro paso, parece que se ha creado gran expectación en la fauna local ante la carrera.

A pesar de la excelente señalización del recorrido, Grillo duda cada vez más, creo que tiene problemas con las gafas de visión nocturna. Ayacucho me achucha por detrás, pero no le dejo adelantarme, ¡faltaría más! En un momento dado bajamos el ritmo y, como íbamos andando, tenemos que parar. Parece que algunos se han perdido, así que Berto baja raudo en su busca; mientras tanto, Ayacucho y un servidor aprovechamos para tontear un poco ante la atenta mirada de Grillo, y dejamos inmortalizada nuestra relación en uno de los árboles del recorrido.

Sobre las 22:15 llegamos a la cumbre de la Mola del Morico, lugar en el que la organización ha decidido hacer parada para avituallarnos y esperar al resto de participantes que acudían desde Montornés.

Apiñados en un par de rocas nos disponemos a degustar los exquisitos manjares que nos hemos traído cada uno de su casa; Berto saca de la mochila una mesita plegable y cubiertos y se enfrasca en la deglución de primer plato, segundo plato, un par de repitos y postre. Los demás acabamos con nuestros bocadillos y lo miramos embobados y admirados de su capacidad trituradora.

Y, ¡oh, sorpresa! Por gentileza de Grillopizza, aparecen ante nuestros ojos una cantidad ingente de pizzas de todos los gustos y sabores… ¡con razón la inscripción costaba 70 €, esto es una ganga! A Berto le pilla algo lleno, pero hace un esfuerzo y se coloca estratégicamente en primera línea de fuego, bloqueando el acceso al condumio como si de un pívot de la NBA se tratara. Aplausos y vítores para la organización que, abrumada, nos regala con unas palabras de agradecimiento que obvio reproducir.

En mitad del jolgorio se oyen voces avisando de la llegada de los participantes montornesinos y, de súbito, un can hambriento aparece de entre los riscos y se lanza sobre las pizzas. Ante la irrupción por sorpresa de Cana –que no era otra la cánida que llegaba precediendo a Ritxi y CarlosPi-, nos quedamos paralizados, lo que aprovechó la susodicha para arrearse entre pecho y espalda media docena de pizzas. Tuvo que ser Berto el que pusiera fin a tal atropello –con las cosas del comer no se juega- y logró poner en fuga a la saqueadora.

Pero ésta, tras la retirada estratégica, volvió a la carga con mayores bríos si cabe, arrebatándole el bocadillo de tortilla a nuestra estrella emergente, Mariarunning; eso sí, lo hizo limpiamente, tal y como certifican los árbitros federados que vieron la jugada. Parece ser que tras la ingestión del citado bocadillo Cana calmó su voracidad, así que la calma volvió al grupo.

Tras el incidente, Ritxi nos aseguró que Cana había salido de casa cenada, cagada y meada (aunque esto último no venía a cuento) pero, ante la mirada incrédula del grupo, logramos sonsacarle que, indignado por el abusivo precio de la inscripción, decidió mantener a dieta a Cana hasta la carrera para que ésta se resarciera en los avituallamientos.

Tras las explicaciones de Ritxi continuó la degustación, amenizada con los chascarrillos del Kiyo y las ocurrencias de unos y otros. Se realizó una sesión fotográfica en la que posamos todos luciendo nuestros trapitos y, finalmente y a pesar de lo a gusto que se estaba –exceptuando que estábamos a 3º bajo cero y con vientos de 70 km/hora-, nos decidimos a reemprender la marcha en sentido inverso.

De inmediato un grupete encabezado por una recuperadísima aunque barrigona Cana se lanzó a un salvaje descenso a tumba abierta amparados en una profunda oscuridad que facilitó su escapada. Tras ellos, el grueso del pelotón encabezado por Mariarunning y Ritxi intentábamos alcanzarlos. El alto ritmo impuesto por la cabeza del pelotón provocó algunas caídas leves, una de las cuales dio con el trasero de Patri en el suelo, aunque ésta se levantó tan velozmente que ni se le manchó el modelito.

Tras un espectacular acelerón final logramos alcanzar al grupete cuando éste llegaba a la pista. Allí se volvió a disgregar el grupo: Mariarunning y Juanmarunning por un lado y Ritxi, CarlosPi y la insaciable Cana por otro se despidieron del resto del grupo, que continuaba hasta meta. Abrazos, besos y alguna lagrimita fueron el epílogo de esta emotiva separación, pero la realidad se imponía y debíamos retomar la carrera.

De nuevo Berto intentó un demarraje, pero de nuevo éste fue abortado por el grupo, que inició la bajada final con un trote alegre y dicharachero; algunas chicas del grupo (y el kiyo) nos demostraron que se puede hablar sin parar y bajar de noche por una senda llena de piedras. La temperatura era magnífica por lo que apetecía mucho correr, así que Paquirunning se puso en cabeza y mantuvo un ritmo estupendo que seguimos todos hasta llegar al aparcamiento.

Una vez finalizada la excursión, a las 23:45 aproximadamente, intercambiamos impresiones durante un ratillo y, tras acordar repetir la experiencia a la vuelta de las vacaciones estivales, nos despedimos efusivamente (más unos que otros).

En resumen, una noche inolvidable en compañía de gente estupenda y en un entorno espectacular,… ¿qué más se puede pedir? Gracias por vuestra compañía.

6 comentarios:

JUNGLA dijo...

Vale, vale....mucha marcha nocturna (envidia la mia) pero ¿dónde está la contrarreloj? En casa de herrero, cuchillo de palo.

Además, eso de echar de menos en la Nocturna se lo dices a todas. (Tr. Todas, dícese depiedraenpiedra). ;-)

Vicente dijo...

La contrarreloj no me ha dado tiempo todavía.

En cuanto a lo de "echar de menos", ¿que quieres que haga si os eché de menos a las dos? :)

depiedraenpiedra dijo...

ejem ejem

ya veo ya...

Vicente dijo...

¡Bueno, bueno, ya está bien de apretarme las tuercas :)!

The Dark Knight dijo...

Jeje.... pratchet; parece que tuvo más exito esa salida nocturna que la crono al Clot heh! jaja.... ya saves; la próxima una crono escalada nocturna por el desierto y seguro que arrasas.......

Si no fuese tan tarde yo iria, pero entonces ya no sería nocturna verdad???¿¿¿¿...... Saludos.

patry dijo...

molaba mi frontal de dolce gabana eeeh??? jajajaja