lunes, enero 28, 2008

Y es que la cabra tira al monte

Llego el domingo a Vilavella con serias dudas acerca de mi estado de forma; para más inri, desde Octubre no piso la montaña, así que mi objetivo será disfrutar lo máximo posible y acabar satisfecho.

Hacia las 8:15 llego a la zona de salida y allí están Mountainrunning, Roadrunner, Alpin y Suat; charlo un poco con ellos y me voy a por el dorsal. Va acudiendo gente, mucha gente, y paso un rato agradable conversando con unos y otros, hasta que decido ir a cambiarme para calentar. De camino al coche me encuentro con Wushi, que me acompaña al coche y así comenzamos a trotar juntos.

Trotando, trotando nos juntamos con Teo, Angel y Ggroc, y a falta de unos diez minutos nos dirigimos a “pillar sitio”; nos ponemos en primera fila, bien situados, aunque poco a poco nos van embutiendo, aunque nos mantenemos muy adelante.

Las 9:00 y ¡¡¡puuuuummm!! Salimos disparados por las calles de Vilavella; la gente va como loca y me pasan cientoylamadre, como si fuera un cincomil.

Intento mantener la calma y que no se me disparen las pulsaciones, y así llegamos a la primera senda, por la que subimos andando, lo que me sirve para descansar y prepararme para la larga subida por pista que se avecina.

En la pista coincido con Punxa y su amigo, y nos divertimos pasándonos una y otra vez –ahora te paso yo, ahora me pasas tú, jeje-. Aparece Jose Alberto y me pasa como una flecha, está fuerte el tío, seguro que en la maratón de Valencia se sale.

Llegamos al primer avituallamiento pero yo no paro -llevo cinturón con un par de botellines. Este tramo de senda es entretenido, y coincido con un tío que me cuenta que lleva cuatro maratones este año y que se estrena en la montaña y ya se ha torcido el tobillo una vez. Le comento que vaya cuidado con la bajada técnica, y charramos un poco mientras llaneamos por la senda.

Al rato me dice que cuando se acaba de subir, a lo que respondo que “ya no queda prácticamente nada, una subidita y luego a bajar”; en eso aparece la subida final al Font de Cabres y oigo que jura en arameo, “… ¡esta carrera la tacho de mi calendario!...!. ¡Y aún le queda la bajada!

La bajada la hacemos a un ritmo medio, hay un fila interminable, así que desisto de pedir paso y me lo tomo con tranquilidad.

Finaliza la bajada y enseguida veo a Pirata; parece ser que ha tenido un aterrizaje forzoso y le molesta algo la rodilla, pero como buen Correcabuts aguanta como un campeón. Me quedo un rato con él y se nos une Andrés; voy relajado y disfrutando, hacía tiempo que no me sentía así.

Faltando aproximadamente tres quilómetros –creo- cambio; las sensaciones son inmejorables –nada que ver con mis angustias en las últimas medias-. Faltando poco más de un quilómetro alcanzo a Tato y a Wushi. Tato se queda y Wushi me acompaña hasta que, tras el último repecho, me lanzo “a saco” hacia la meta, entrando con muchas fuerzas y con la moral recuperada, en 1h52’02”, a seis minutos de mi marca del año pasado.

Al llegar, rápidamente recojo la “maleta” del corredor, charla rápida con un puñado de compañeros y a casa que me espera la familia.

Fue una magnífica mañana en la que me reencontré con sensaciones que últimamente había perdido, más no puedo pedir.

jueves, enero 24, 2008

Deshojar la margarita

La semana arranca descansando el lunes; no tengo ganas de salir a correr después de la media de Benicàssim, me encuentro físicamente bien pero algo desmotivado, así que me voy a comer con un compañero de trabajo. Ya le estoy dando vueltas al tema de la maratón de Valencia, barajando varias opciones: participar, hacer sólo la media u olvidarme de la maratón y hacer Borriol.

El martes hago 18km a algo menos de 5’/km y me encuentro bien; coincido un buen rato con Titín y disfruto de una buena charla.

El miércoles no puedo salir por cuestiones de trabajo, así que por la noche hago ejercicios de propiocepción para fortalecer mis rodillas. Me he quedado con ganas de salir, pero esto es lo que hay.

Hoy jueves tampoco salgo: un amigo no está pasando por un buen momento y he quedado a comer con él. Parece que la semana se tuerce definitivamente en lo que respecta al tema correril, y casi tengo decidido no participar en la maratón, pero como no me fío de mis cambio de humor supongo que hasta última hora no deshojaré la margarita.

Espero salir viernes, sábado y domingo (a Vilavella, claro) y al menos completar una semana decente. Ya os contaré.

lunes, enero 21, 2008

Media maratón de Benicasim

Salgo a las 8:15 de casa en dirección a Benicasim. El día ha amanecido neblinoso, y al salir de Castellón se ve un paisaje espectacular, la espesa niebla cubriendo los naranjales como si de algodón de azúcar se tratara.

Llego y aparco en la cuesta del ayuntamiento, bien cerca de la salida. Bajo a por el dorsal y allí comienzan a arribar multitud de conocidos: foreros como Jungla, Nomaz, Estikfart, Danimitja, Sergiorunner, Xixanrunning, Chokobon, Roadrunner, Erenida, RubenigueCS, cyklista, Joserunning, NachCS, Alex, Berto, … ; clásicos como Titín, Valentín, ToniEvasion, ..; y mis compañeros de Amics del Clot Rafa, Manolo, Jose, … Y, cómo no, el fotógrafo oficial del evento, Ggroc -gracias por las fotos-.

Tras un buen rato de charraquetecharraré, me voy a poner el dorsal y comienzo a calentar con Nomaz; la temperatura es agradable, algo fresca pero muy buena para correr. Compartimos unos minutos con el campeón Xixan –que después haría un carretón, el tío-, a ver si se nos pegaba algo, y después nos dirigimos a la línea de salida.

Somos unos 300 participantes, así que la salida se lleva a cabo sin agobios; las dos primeras vueltas –cinco kilómetros en total- las realizo muy cómodo, en 21’02” y a 160ppm; acometemos la primera vuelta larga y voy solo, aunque unos metros delante de mí va Joserunning con un compañero. Sigo solo hasta el km. 9, en el que me uno a Jose y su compañero; sigo sintiéndome bien, aunque me noto algo duro el gemelo, y pasamos el 10.000 en 42’38”, sin pasar de 162ppm. El kilómetro 11 era el de la subida del Orange, que hice en 4’33”, bien. Todo seguía bien hasta el km. 14, en el que comencé a notar las piernas cansadas –igual que en Castellón-; intenté mantener un ritmo decente, pero no había manera: 4’30, 4’34, 4’36, 4’46, .., y entonces llegó de nuevo la subida del Orange –km. 19- y, …¡5’20! Ahí ya acabé de hundirme, haciendo 5’04 y 5’00 en los 2.097 últimos metros, para acabar en 1h34’25.

En meta estuve un ratillo charlando con unos y otros, pero pronto me fui al coche, a estirar un poco y a casa, con las piernas doloridas.

He decidido hacerme una analítica a ver si tengo algún déficit, esto no me había pasado nunca antes de Castellón. No pasé de 165ppm –y eso en pocos momentos- cuando normalmente las segundas partes de la media estoy por encima de 170ppm, así que a ver qué sale en la analítica.

La carrera me gustó, el recorrido es bonito, tanto las dos vueltas por el pueblo como las largas por la orilla del mar. Bien la organización y correcta la bolsa de corredor, así como excelente el ambiente, hay que ver a cuánta gente conozco. Si el año que viene la vuelven a hacer y no pasa nada, allí estaré.

viernes, enero 18, 2008

Sube y baja

Subo solo por una senda estrecha, empinada, de suelo pedregoso y tremendamente irregular; voy completamente concentrado, escudriñando los primeros metros delante de mí en busca del lugar adecuado en el que debo realizar el siguiente apoyo. La subida es larga y dura, mi corazón late a buen ritmo y mi respiración es rápida pero acompasada; los pasos cortos y ahorradores, sin poderosas exhibiciones –todavía quedan varias horas para llegar-.

El final de la subida se hace más duro, y mi respiración es ya bastante agitada. Decido seguir corriendo, sin andar; las piernas me duelen por el esfuerzo, sudo a mares, pero me esfuerzo al máximo en mantener la concentración, queda muy poco para llegar a la bajada, sí, ya está ahí.

Hay unos metros llanos en los que recupero el resuello, los justos, y enseguida me lanzo a bajar. Me encantan este tipo de bajadas técnicas por senda: tienes que estar muy concentrado para poder ir rápido, anticiparte al terreno, ser ligero de piernas. No tengo las piernas muy fuertes, así que tengo que compensar esa carencia con habilidad y pillería, evitando grandes saltos que puedan lesionar mi maltrecha rodilla.

Los primeros minutos son tremendos, con la adrenalina por las nubes, eufórico, pero conforme se va alargando la bajada las piernas comienzan a notar la exigencia del terreno y así aparecen los primeros sobresaltos.

Felizmente no llego a aterrizar en ninguna ocasión, y acabo la bajada cansado pero satisfecho; no hay nada como una dura subida por una preciosa senda seguida de una bajada técnica por otra senda igualmente bella.

jueves, enero 17, 2008

Ensoñaciones de un paseante solitario

Hace poco en el foro amigo de carreresdemuntanya se abrió un hilo acerca de la disyuntiva entre asfalto y montaña en los corredores; yo dije que era montañero por vocación y otras cosas más, pero reflexionando posteriormente me doy cuenta de que lo que me gusta es simplemente correr. Pero, ¿porqué?.

La necesidad de soledad: corriendo me siento solo, agradablemente solo. Creo que las personas necesitamos la soledad, que ésta nos hace mejores, más reflexivos y nos modela, limpia nuestras mentes y nuestro espíritu, nos hace más fuertes. Y la soledad la encuentro tanto rodando en solitario por el monte como rodeado de cientos de personas en una carrera, por ello hablo del sentimiento de soledad.

La búsqueda de la libertad: corriendo me siento libre, una palabra con un significado sagrado para mí, posiblemente mi vocablo preferido. Desgraciadamente, el concepto de sociedad que hemos creado y en la que vivimos coarta continuamente nuestra libertad, por ello son escasos los momentos de intensa libertad, y casi siempre íntimos.

La extraordinariamente rica dicotomía de sensaciones fortaleza-debilidad. Correr me hace sentir inmensamente fuerte y apabulladoramente insignificante, y ambas sensaciones me fascinan; la primera me proporciona necesarias dosis de autoestima y la segunda me “devuelve” a la realidad, pero también aumenta mi capacidad de superación.

También el ambiente que rodea este mundillo me influye positivamente. He conocido buena gente: gente que te echa un cable cuando no estás bien, que comparte tus sensaciones, que se dejan la piel para organizar carreras en las que puedas disfrutar, … en fin, gente que merece la pena conocer.

Por todo esto me apasiona correr, o eso creo –soy una duda con patas-.

miércoles, enero 16, 2008

2008: Aventuras en el espacio ... correril

Ha comenzado el 2.008 y seguimos corriendo, lo cual es ya una gran noticia. Los objetivos que me planteé el pasado Septiembre todavía no se han alcanzado, y preveo que el de la maratón de Valencia va a estar muy difícil. Lo de bajar de 40' en un 10.000 espero conseguirlo, así como acercarme a 1h28 en la media; ya veremos.

En lo que va de temporada he competido muy poco, y lo echo de menos; sobre todo, añoro el contacto con los viejos conocidos -iba a dar nombres pero son tantos que mejor dejarlo así-. Entre mis obligaciones parentales y alguna ausencia de última hora por razones extradeportivas, desde septiembre sólo he participado en cuatro carreras; ni siquiera pude acudir a ninguna de las SanSilvestre que se realizaron por la zona.

Para compensar esta falta, tengo previsto acudir a Benicassim el día 20, a Villavieja el 27 y a la Maratón de Valencia el 17 de Febrero, y luego darle duro a la montaña. Espero así reencontrarme con todos vosotros.

Aprovecho aquí para dar publicidad a dos eventos que me parecen impresionantes: la aventura de los hermanos Iglesias -Ayacucho y Berto para los foreros-, consistente en correr las 26 maratones que se celebran en España durante la temporada 2007-2008, que es para quitarse el sombrero e incluso el peluquín; y la conmemoración del 10º aniversario de la conquista del Everest por CarlosPi, con la inestimable ayuda de RitxiCS. Quede aquí constancia de mi admiración por estos grandes deportistas.

A Jungla y Erenida decirles que haré lo que puede para mantener dignamente actualizado este blog, aunque no prometo nada, que después no puedo cumplirlo. Sigo vuestros blogs, aunque no con tanta frecuencia como antaño, no creais que os tengo olvidadas. Como compensación, esta foto que Raúl y un servidor nos hicimos con el propósito -fallido- de regalárosla como portada del calendario correril de 2.008 :).